El programa reveló que en ese año los caleños produjeron menos de un kilo diario de basuras, lo que ubicó a la ciudad como la segunda entre las poblaciones evaluadas (por debajo de Medellín y superando a Barranquilla Cartagena, Bucaramanga y Bogotá) con menor producción de residuos.

Para la directora del Dagma, María del Mar Mozo, “contar con un relleno sanitario (en Yotoco) con todas las características técnicas, nos ayuda a que no tengamos impactos ambientales tan grandes. Los operadores de aseo también están haciendo un buen trabajo” si se tiene en cuenta que en la ciudad se producen por lo menos 1800 toneladas de residuos cada día.

En la medición de Hábitat Urbano, que se presentará oficialmente mañana en Bogotá, también se destaca que Cali es una de las grandes ciudades con menos Smog (medido en Material Particulado PM10.).

La reducción en emisiones de dióxido de carbono por la implementación de combustible limpio en el MÍO y el cierre del botadero de Navarro se constituyen en los logros más significativos para la ciudad en esta materia, según la Directora del Dagma.

“La reconversión de combustibles de los vehículos también ha contribuido en la disminución del material particulado en el aire, vemos que con el paso del tiempo se tienen resultados positivos”, explica Mauricio Vásquez, coordinador de la Red Cali Cómo Vamos.

Para expertos como Jairo Lopera, profesor de la Escuela de Ingeniería Mecánica de la Universidad del Valle, “ya hay iniciativas que se están adelantando, como la propuesta del bus eléctrico en Cali. Hay tendencias que mejoran la calidad del aire, como el uso del gas natural, vehículos con propulsión eléctrica e híbridos, que son más populares en otros países y que se deben pensar para Colombia”.

Pero aunque los indicadores de esta medición son positivos, eso no significa que no haya aspectos por mejorar. Mauricio Vásquez asegura que “en materia de residuos sólidos, la meta para la ciudad es reducir aún más esa producción, para que disminuya el impacto ambiental. En la medida en que Cali tenga más cultura del reciclaje y se desarrolle como negocio (con las personas que realizan este oficio en la calle), se logrará aprovechar los residuos. A eso debe sumarse la cultura del ciudadano a la hora de producir basura y reciclar en sus hogares”.

A ello se suma la necesidad de resolver la problemática de botaderos crónicos de escombros (hay identificados 140 sitios) con la habilitación de estaciones de transferencia, toda vez que Cali no tendrá un sitio de disposición final.

Sobre la calidad de aire, “todavía tenemos una gran problemática. Aún estamos en deuda con la salida definitiva de los colectivos, que usan combustibles muy contaminantes. También sigue el impacto para el norte de Cali por parte de los gases que salen de la zona industrial de Acopi-Yumbo. Además, hay canteras de piedra que generan problemas de polvo. Quienes sufren por esto no entienden cómo una encuesta da índices de mejoría”, dijo Jair Llanos, veedor ambiental de Cali.

Más resultados

• Según el informe, Cali y Medellín son las ciudades que más consumieron agua potable, durante el año 2013. La capital del Valle superó el índice promedio de consumo que fue de 101 litros de agua al día.

• Cali (junto a Medellín y Bogotá) está entre las ciudades evaluadas que cuentan con un plan de descontaminación por ruido.

• El informe también la destaca como una de las ocho ciudades que hoy cuentan con un mapa actualizado de rudo, que sirve para identificar los sitios más impactados por esta problemática.

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